De los candidatos que se presentan en la próxima contienda electoral, como decía Bolívar: “los hay de todos los colores y razas”. Debemos buscar con lupa, el más honesto, pues sabemos de la degradación de la cosa pública. Muy poca gente de bien les interesa la política y los peores son aquellos que carecen de escrúpulos, los maestros del engaño, incluso los que disfrazan su codicia y se presentan en la plaza pública como campeones de la lucha contra la corrupción, son los que están al acecho con sus ríos de dinero, comprando conciencias y negociando con la miseria humana.
Teniendo en cuenta que los recursos municipales o distritales son sagrados, no cualquier persona puede llegar a dicho cargo; se manejan muchos recursos, que si fuera una empresa privada, su dirección o gerencia estaría en manos de un talentoso funcionario que dé resultados.
Los actos de corrupción que se presentan en nuestra amada patria día a día y donde el repudio por lo político aumenta, hacen difícil encontrar grandes líderes que sepan encausar los anhelos de un pueblo, para salir de una vez por todas del subdesarrollo.
Álvaro Gómez afirmaba: “La política se ensució hace más de dos décadas, cuando cayó bajo el dominio del clientelismo y se sometió a la preponderancia del dinero, desde entonces quedó sucia. Es la forma de dominio que ha tenido el Régimen imperante para poder doblegar la opinión pública y aprovecharse de las oportunidades de mando y de los gajes del poder”.
El país tocó fondo en materia de corrupción, de allí que sólo nos quedan dos caminos: permitir que con nuestro voto, un grupo de politiqueros sin ética sigan robándose los bienes del Estado; ó tomar con seriedad el certamen electoral , para que se elijan personas con ideas y principios.
La tarea de enderezar nuestra débil democracia, es tarea de todos. El primer acto nos obliga ha escudriñar bien la historia de los candidatos, su pasado hay que tenerlo en cuenta, puede ser una figura joven, pero si no se tiene principios éticos, contaminado de las costumbres políticas de corrupción (repartiendo cemento) es perder el voto.
Como decía Cantinflas “allí está el detalle”, actor mexicano que en varias películas mando duros mensajes contra la clase política corrupta. En nuestro medio político se volvió costumbre ver salir de los cargos públicos funcionarios forrados de plata; permanecemos impávidos, no hay castigo para estos pillos. La Procuraduría en mano de la persona más cínica del sistema político, donde los que no piensan como él están condenados a la hoguera y entre sus compartidarios como van a misa pueden seguir haciendo de las suyas.
Hoy la preocupación mas grande que ronda el próximo certamen electoral son los grupos de las bacrim y otros grupos al margen de la ley, están llevando a muchos candidatos a negociar las rutas por donde pueden transportar su coca, saben de la debilidad de muchos, capaces de venderle el alma al diablo con tal de ganar.
Por un candidato que le quepa los problemas de los ciudadanos en la cabeza, capaz de desarrollar su ciudad así el Siglo 21, en orden y segura, con programa políticos fácil de cumplir, con gente a nivel nacional que sepan dónde ponen la Garzas, por ese voy a depositar mi voto el próximo 25 de octubre, si Dios y la Virgen de Torcoroma me lo permiten.
Hephel