Volaron los alcatraces de la juventud
y el sueño que a veces se materializó
muchas otras ¡ay! también se truncó
igual en invierno retoñó la ingratitud
Ahora esquivo brilla el sol primaveral
las olas su melódico sonido acallaron
en el camposanto los perros aullaron
y un olvido tenaz al ayer le causa mal
Bebe el agua si a tu paso la tropiezas
al fruto tierno y maduro no magulles
de la conquista sólo di sus grandezas
Fértil llovizna es el secreto guardado
Dispensa cariño. La vida lo retribuye.
Nada inventamos ¡todo está creado!
Jorge Carrascal Pérez