Será que en la Habana se negocia el cese del conflicto armado que hay en Colombia o la consecución de la paz en el País. Una no es lo mismo que la otra, pues la paz en Colombia no radica en el cese de un conflicto con un grupo armado ilegal que es considerado terrorista, sino que va más allá de la guerra armada, trasciende a un conflicto social y político inmerso en la patria desde hace siglos.
Los colombianos nos hemos dedicado a culpar a los terroristas de las FARC de todas nuestras desgracias, y no es que estamos muy alejados de la realidad, pero nuestros problemas como país van más allá de un conflicto interno, las raíces o la madre de esta guerra es un engendro que ha vivido con nuestra añorada libertad colonial y que seguirá viva en el vientre de la patria hasta que los colombianos no entendamos que para conseguir nuestras metas no es necesaria la fuerza, y que la tolerancia, el respeto, la dignidad y los valores deben primar por encima de cualquier deseo de poder.
Muchos afirman que el periodo de la “Patria boba” ya pasó, pero cada día me convenzo más que somos una manada de “Bobos” queriendo hacer patria, y ¿cómo lo hacemos? a la fuerza; no me gusta lo que piensas pues te asesino, no estoy de acuerdo con tu gobierno pues tomo las armas y me voy para el monte soñando algún día entrar con las “Armas enarboladas al Palacio de Nariño”, no estoy de acuerdo con lo que dices, pues te trato de “Paraco” o “Guerrillo”, “Mamerto” o “Fascista”, somos una manada de “Bobos” que pensamos que la derecha o la izquierda son la solución a nuestros males, derecha o izquierda no es más que la evolución del conflicto entre Liberales y Conservadores, o más aún, la discusión tonta entre la elite colonial criolla tratando de defender gobiernos centralistas o federalistas que carcomieron el alma independentista de nuestros padres de la patria y fueron sorprendidos por los españoles con los “calzones abajo” y les toco huir o entregar sus vidas por no dejar de lado las preferencias individuales y sobreponer el bienestar general de la naciente patria por encima de todo; esto demuestra que desde ahí inicia nuestros periodos de bobadas y guerras sucias.
¡Oh Bolívar¡ llegas como el Gran Libertador a despertar esta Patria, pero siguen los problemas de rencores y odios, perdón, de causas justas de ideologías contrarias en favor de la recién creada Gran Colombia, ahora ya avanzó la “Patria Boba”, por un lado los adeptos a Bolívar y por el otro lado los adeptos a Santander, la puja entre dos bandos para saber quién manda más ha tenido jodido este país, por eso no has pasado lo que nos ha pasado, ya no solo vinieron los españoles a jodernos, sino también los gringos a llevarse a Panamá e incendiar más la guerra, todos sacan provecho de nuestras “Boberías” como dirían en mi tierra.
¿Se acabó la patria boba? De eso hay mucho y nos queda para rato, ya lo demostraron los Liberales y los Conservadores autores de terribles masacres, lo sigue demostrando las guerrillas que inconformes con el sistemas se alzaron en armas, y que de guerrillas pasaron a terroristas y narcotraficantes, seguido a eso nacieron los paramilitares con razón de la defensa de unos y masacrando a otros, nos volvimos más bobos y peligrosos, unas bestias sin domador; solo son lucidos los bobos con poder y asiento en el Congreso y la casa de Nariño, otros que pelean por poder y puestos, cada quien defiende sus intereses.
Ahora apreciados lectores, les hago una pregunta, ¿Ustedes se comen el cuento que en la Habana se está negociando la paz de Colombia? No coma cuento y mejor coma carne, esa tal paz negociada de Colombia viene de hace muchos años, es tan vieja como los mismos deseos de los colombianos por el poder; para que haya paz debe surgir una transformación social y política total en nuestro país, porque aunque las FARC plasmen una firma en un papel y dejen las armas, aun sabiendo que queda el ELN y las Bacrim haciendo guerra, no va a ver una paz plena y verdadera, porque los problemas de Colombia no nacieron en el monte, los problemas de Colombia nacieron en la elite política de siempre, allá sentadotes enarbolados y soberbios de poder.
Como diría Monseñor Rubén Salazar: “El cáncer de Colombia es la corrupción”, yo diría apreciado prelado que el cáncer de Colombia más que la corrupción, son las ansias de poder, y esas ansias de poder nos lleva a la corrupción y es esa corrupción, de la que usted nos habla, que ha llevado al País a tanta miseria, desigualdad y atraso en todo el sentido de la palabra, conllevando a un grupo de bobos a alzarse en armas para contrarrestar esa corrupción, no sabiendo que todos al final terminamos siendo lo mismo; que tristeza de un país tan bonito Colombia, si tan solo pasáramos de una fallida revolución de armas a una revolución social y política de ideas y pensamientos basados en la diversidad y el respeto.
Apreciado lector, con todo esto quiero decirles que no coma cuento, en la Habana no se está negociando la paz de Colombia.
Escríbale a Luis Maver Navarro: lmnavarroe@ufpso.edu.co
Por, Luis Maver Navarro Estévez
Hemos avanzado y mucho. Pensarnos la patria boba y relacionar eso con las abusrdas actuaciones de hoy, es algo fuera de contexto. Igual, para decirle bobo a cualquiera, con un teclado e smás que suficiente.
Te agradezco especialmente por tu mensaje, sabes que contás conmigo. Gran abrazo.